El senador Juan Carlos Loera de la Rosa (Morena) inició una ruta de trabajo con la organización de la sociedad civil Alianza Nacional RegidorMX para emprender una consulta amplia con organizaciones de la sociedad civil, con el objetivo de reformar la Ley General de Participación Ciudadana.
Como presidente de la Comisión de Asuntos de la Frontera Norte, Loera anunció que presentará una iniciativa para crear la Comisión de Participación Ciudadana en la Cámara de Diputados.
Subrayó que esta propuesta no implicará aumento en el gasto público, sino una reorganización de recursos ya existentes, a fin de facilitar la presentación de iniciativas ciudadanas, que a menudo quedan rezagadas en el Congreso.
En la ceremonia de presentación, estuvieron presentes Sergio Meza de Anda, director del Plan Estratégico de Juárez y fundador de RegidorMX, así como representantes de la sociedad civil, la academia y organismos electorales.
Loera destacó el papel de RegidorMX en la construcción de mecanismos de democracia directa en Gobiernos locales. Señaló que su modelo de contraloría y participación social ya opera en 21 municipios del país.
Por su parte, Meza de Anda planteó la necesidad de una nueva Ley de Participación Ciudadana con propuestas surgidas desde la ciudadanía y con atención a las realidades locales, ya que, dijo, “cada zona tiene su propia interpretación de lo que es México”.
Agregó que es urgente rediseñar al municipio como orden de Gobierno, pues actualmente está limitado y depende en exceso de la federación.
Durante el conversatorio, los participantes coincidieron en que la participación ciudadana es un derecho humano, no una concesión política.
Abelamar Chacón Rodríguez, coordinador de RegidorMX en Chihuahua, sostuvo que no puede hablarse de democracia sin permitir la participación activa de la ciudadanía, más allá de los procesos electorales.
Pamela Pérez Gómez, de Política Colectiva, recalcó la necesidad de contar con reglas claras y accesibles para ejercer este derecho.
Entre los desafíos señalados se encuentran:
- Altos umbrales para activar mecanismos
- Falta de compromiso institucional
- Escasez de recursos
- Simulaciones en procesos de consulta
Asimismo, se compartieron experiencias exitosas como los presupuestos participativos, cabildos abiertos e iniciativas ciudadanas que han influido en decisiones públicas, especialmente en contextos con barreras de acceso reducidas.
Loera reiteró su convicción de que la participación ciudadana debe alcanzar rango constitucional, y que la sociedad civil tiene “la mayor claridad sobre los caminos a seguir”.
En ese sentido, mencionó al Plan Estratégico de Ciudad Juárez y su experiencia en el programa «La Escuela es Nuestra», donde comunidades decidieron el destino de recursos federales.
“No se puede hablar de democracia sin la participación plena y real de toda la ciudadanía”, concluyó.
