En la frontera entre Ciudad Juárez y Nuevo México, en el área de Santa Teresa, una empresa constructora estadounidense levanta, detrás del muro fronterizo, una segunda barrera de metal de 12 metros de altura, diseñada para impedir el paso ilegal de migrantes a su territorio.
Las labores de construcción en este lugar comenzaron desde el mes de junio, cuando la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, anunció la ampliación de esa estructura.
A finales de agosto, se observaba que la construcción del muro apenas rebasaba los límites del puesto de inspección ganadera, mientras que ahora, dos meses después, se aproximan hasta la altura de la colonia Rancho Anapra.
En total, se construirán 13 kilómetros de muro fronterizo en el área, 11 kilómetros en Santa Teresa y 2 más en el territorio de El Paso.