Los gatos son animales muy cariñosos y divertidos, tener uno en casa hará que tu vida sea más feliz. Además, son de las mascotas más limpias que existen y de fácil adaptación.
Si has decidido adoptar o ya tienes uno, toma nota de estos cuatro errores que son muy comunes, evitarlos hará que su crianza sea más fácil.
Pensar que son como un perro
Por lo general, los gatos son más independientes y menos jerárquicos que los perros. Cuando buscan la compañía y el cariño de sus dueños es porque realmente desean atención y porque se sienten a gusto con ellos.
No vacunarlos ni desparasitarlos
Otro error bastante común es no prestarles la atención sanitaria que necesita. Es importante acudir al veterinario para que establezca un programa de vacunación y desparasitación.
Descuidar su educación
Es vital crear un vínculo con ellos, lo cual incluye jugar regularmente y corregirlos con órdenes claras en el preciso instante en que tengan un comportamiento no deseado.
No esterilizarlos
Su época de reproducción puede traducirse en algunos comportamientos incómodos para los dueños. Esta se da en primavera-verano, cuando las gatas tienen celos de hasta una semana con descansos de una o dos. En los gatos que viven en el interior puede durar más, ya que es difícil que detecten el cambio de estación. La esterilización puede prevenir enfermedades (como tumores de útero o de ovarios) y evitar problemas de comportamiento como el marcaje con orina.