No los desanima el frío. Los migrantes de Venezuela que mantienen su campamento junto al río, le hacen frente con fogatas, más cobijas, chamarras, durmiendo pegaditos, en el interior de su carpa. El calor que emana de la familia es ahora su mayor defensa.

La historia del desayuno villista que sucedió en el Ojo de la Casa
23 marzo, 2025