La endometriosis afecta a una de cada diez mujeres en edad fértil y las causas de su origen son desconocidas. Esta enfermedad crónica y progresiva consiste en la aparición y crecimiento de tejido endometrial fuera de su ubicación natural: el útero.
Al crecer, puede convertirse en bultos, normalmente benignos –no cancerosos-, los cuales causan un dolor que va de leve a severo, infertilidad y periodos abundantes.
Los lugares más frecuentes para su aparición son la cavidad pélvica, principalmente en los ovarios; en la parte posterior del útero, en los ligamentos uterinos, en el intestino y en la vejiga.
Cada mes el revestimiento del útero crece, alistándose para el embarazo pero cuando este no se da, se adelgaza y comienza el ciclo menstrual.
En las mujeres que tienen endometriosis, los tumores ubicados al exterior del útero también sangran, desarrollando una inflamación y tejido cicatrizal.
Entre sus síntomas se encuentran el dolor menstrual y al miccionar, problemas digestivos, alteraciones menstruales, relaciones sexuales dolorosas, fatiga, cansancio e infertilidad.
Pero no todas las mujeres presentan signos, a pesar de que pueden estar en un grado severo, por lo que debes estar atenta a los dolores intensos y repetidos durante la regla para acudir de inmediato con tu ginecólogo.
En corto
- Tiene una prevalencia entre el 15 y 20% de las mujeres.
- Puede aparecer desde el primer periodo hasta la menopausia.
- En el mundo hay más de 176 millones de mujeres que la padecen.
- De un 20 a un 30% de las mujeres que tienen dificultades para embarazarse pueden tener esta enfermedad.
- Retrasar la maternidad, tener menos hijos y acortar el periodo de lactancia, hace que la mujer tenga más reglas y es más fácil que aparezca.
- Actualmente no existe una cura, pero se puede tratar con fármacos analgésicos y tratamientos hormonales y quirúrgicos.
Fuente: www.endoinfo.org