Patricia Laurent Kullick (Tampico, 1962-2022, Playa del Carmen) fue una escritora del norte mexicano que residió buena parte de su vida en Monterrey, Nuevo León. Ella forma parte de la generación de escritores norteños que destacaron desde sus localidades, luego del reconocimiento que habían obtenido los autores anteriores: Gerardo Cornejo, Jesús Gardea, Ricardo Elizondo Elizondo, Daniel Sada y Severino Salazar.
En los cuentos de Laurent Kullick se muestra el norte, pero no aislado, no autárquico, sino aquel que puede equipararse a una ciudad europea o una ciudad africana, es decir, los personajes y sus historias podían ubicarse en cualquier parte del mundo. Las situaciones extrañas, grotescas, por momentos oníricas, podían ser las experimentadas por un regiomontano o un alemán internado en la noche. Esta idea se ve claramente en el título de su libro “Esta y otras ciudades” (1991).
En el cuento “Esta y otras ciudades”, quien narra la historia es un director de teatro poco exitoso que describe a la ciudad de Monterrey desde el desprecio, una ciudad con un sol picante, una ciudad que lo indigesta y la cual lleva atragantada. El narrador, de quien no se sabe su nombre, dice que la gente mágica nacida en Monterrey emigra a un lugar más digno de su fantasía. Quizá como Cleotilde, con quien nos enteramos compartió su vida y que se había ido a otras ciudades, a las que él enviaba cartas y en la oficina de Correos pronunciaba el destino en voz alta para que escucharan los demás: Jordania, Bangkok o Tailandia.
Cleotilde regresa a Monterrey, luego de vivir un tiempo en el extranjero. Acaso como esas personas que vuelven engañadas por el recuerdo de esa ciudad llena de basura que se desquicia debido a una lluvia de dos horas. Cleotilde había escrito en su diario: “este mundo es un espejismo donde me estrello cada vez que despierto, esta es la última descalabrada”. El narrador piensa en estas palabras a cada momento. Hay ciudades como esta, como Monterrey, en el caso del cuento, o como esta, Juárez, que nos hacen daño, pero que nos hacen regresar, así son esta y otras ciudades.
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