Mario Vázquez: entre el agandalle a la 4T y el último deseo al moribundo PRI
En estricto apego a la normatividad del Congreso del Estado, y a los acuerdos que tomaron las bancadas del PAN y Morena, este último debería ocupar la presidencia de la mesa directiva del Congreso del Estado en el próximo período ordinario de sesiones. Es decir, a partir de septiembre y hasta agosto del año próximo.
Sin embargo, la bancada del PAN, y más en concreto, su coordinador, Mario Vázquez, ya comenzó a desconocer el acuerdo y a ponerles “peros” a los morenistas, si es que quieren sentarse en la silla presidencial del Legislativo.
Entre otros requisitos, les pide apoyo irrestricto a la reforma constitucional que impulsa el PAN, pero sin meterle mano, es decir, sin poner sobre la mesa los temas torales que tantas discusiones sin fin han desatado, a saber: elección de regidores y reducción del tamaño de los ayuntamientos.
Ahí sí que no se ve para cuándo se pongan de acuerdo, porque al PAN no le interesa cambiar la ley para que cada aspirante regidor haga campaña por separado del candidato o candidata a la Presidencia Municipal, mientras que para Morena es una reforma fundamental.
Tampoco se ven visos de acuerdo en torno a posturas como la reducción del tamaño de los ayuntamientos, aunque, por lo pronto, ya hay un acuerdo de que algunos municipios tienen demasiados regidores. Son tantos que, en algunos municipios, la foto del Ayuntamiento parece más de una reunión familiar.
La otra que tiene el PAN encima es el compromiso asumido con el PRI. Así de mermado y boca abajo, sin más aspiraciones que retener el registro estatal, el tricolor todavía aspira a ocupar la presidencia del Legislativo, aunque sea por una última vez. Y tal parece que el blanquiazul está dispuesto a concederle una última voluntad al moribundo.