Una de las principales misiones de toda madre y padre es que sus hijos crezcan sanos, fuertes y alejados de todas las enfermedades.
Conseguirlo no siempre es tarea fácil, pero se puede lograr si se cuida su salud desde su nacimiento; te compartimos algunas claves.
El pediatra es tu aliado
En cada consulta el pediatra hace una valoración general de la salud, peso y talla del niño; además, ofrece un asesoramiento sobre temas como la alimentación, higiene, vacunación y prevención de enfermedades y accidentes.
Cumple con sus vacunas
Algunas enfermedades son potencialmente graves, pero se pueden prevenir gracias a las vacunas. Estas tienen la función de activar la producción de los anticuerpos a una edad específica, los cuales disminuyen el riesgo de enfermar.
Alimentación sana
Fortalece las defensas naturales de su cuerpo con una alimentación sana, variada y nutritiva. Las verduras, frutas, lácteos, legumbres y carnes blancas deben estar presentes en su plato.
Vigila sus horas de sueño
Los niños descansan, recuperan energía, mejoran su capacidad de aprendizaje, atención y fortalecen su sistema inmunológico a través de las horas de sueño.
Cuida su salud bucodental
La buena higiene dental, el uso adecuado de fluoruros y revisiones periódicas con el dentista, incluso antes de que aparezcan sus dientes, son parte del cuidado.