Como dicta la tradición, los fronterizos prepararon música, comida y altares, además visitaron panteones, para recibir a sus seres queridos que abandonaron ya el plano terrenal, en esta fecha donde la tristeza no tiene cabida, porque es el recuerdo de los que ya no están, aquello que los mantiene aquí.
¡Nieva, nieva!
9 enero, 2025