Carlos Gámez cumplió 23 años el sábado 9 de diciembre, y ese día platicó sobre lo que vivió ese fatídico primero de enero de 2023 cuando perdió a su padre Guadalupe Gámez de 52 años, quien fue el primero de los 10 custodios asesinados por un comando armado durante el motín ocurrido en el Cereso Estatal 3 ese día.
Relató que su madre resultó lesionada después de caer del techo de su casa un día antes, el 31 de diciembre y que para la tarde ya se recuperaba en el hogar bajo los cuidados de su hijo.
“La mañana del día primero nos dimos cuenta de la noticia del motín en el periódico porque del Cereso no nos avisaron nada. Vino un tío y ya como a las ocho de la noche fuimos. No nos dejaron entrar hasta que les enseñamos una identificación de mi papá y es como pudimos entrar, y ya adentro nos confirmaron que había fallecido”, recordó.
Los mantuvieron encerrados durante más de una hora y en ese lapso es cuando salieron las unidades del Semefo con los cuerpos de los fallecidos pero solo para encontrarse a las afueras del penal con las manifestaciones de protesta de los otros familiares de las víctimas, mientras que Gámez y su tío permanecieron encerrados en la caseta del reclusorio hasta que un amigo de su padre les consiguió la manera de salir.
Al día siguiente Carlos se dio a la difícil y dolorosa tarea de ir a identificar el cuerpo de Guadalupe, su padre.
“Lo primero que pensé fue en mi madre que estaba enferma. Llamé a su familia y les conté para ver si podían venir a apoyarnos. Ellos son de Casas Grandes”, mencionó el joven de 23 años.
No han cumplido con la justicia
Dijo que hasta ahora por parte de la autoridad estatal lo único que han recibido es el seguro de vida junto con la pensión por viudez y por orfandad para él como hijo único.
“No me parece justo ni correcto cómo se han llevado las cosas y con el impacto que esto ha tenido en nuestras vidas, no creo que con esto se vayan a solucionar las cosas… No, no creo que más dinero vaya a solucionar la cosa. En ese aspecto que ya no tenemos que preocuparnos por el dinero si podría ser que haya sido justo, pero en justicia no nos han dado ningún informe ni nada”, reclamó.
“Nada, absolutamente nada. No nos han dicho nada, si se detectó un culpable específico, si están condenando debidamente. Nada nos han informado, solamente han hablado en dos ocasiones de personas que están llevando amparo para deslindarse de este suceso”, declaró.
Recalcó nuevamente que los recursos que le han dado a su familia son insuficientes para compensar la pérdida tan grande de ya no tener a su padre.
Él estaba en un lugar seguro
“A mi papá siempre le gustaron ese tipo de trabajos. Él fue soldado y después escolta, y siempre le gustó ese tipo de trabajos. Cuando supe del motín no pensé que a él le pasara nada porque estaba en una torre de vigilancia, apartado de todo esto. Nunca se me ocurrió que le pasara algo porque en otros incidentes antes él había estado ahí seguro”, confió.
“Nos han contado que ese día llegó a la caseta para registrarse y se puso a platicar con los compañeros, cuando llegaron los del comando armado que los agarrraron y los encuartelaron, y únicamente mataron a mi papá ahí”, dijo Carlos mientras desviaba la mirada hacia abajo.
Otros compañeros contaron que se escondieron adentro, pero dijeron que solamente le dispararon a él en ese momento… los demás no salieron por miedo”, agregó, lamentando enseguida que a su padre le hubiera tocado laborar ese primer día del año.
“No tengo nada qué decirles a los asesinos. Nada que hagan va a poder remediar lo que hicieron, solo que se haga la justicia debida (…) esto ha sido un gran impacto en nuestras vidas y sí nos afectó y nos cambió todo”, manifestó mientras sus ojos se llenaron de lágrimas.
No nos han dicho nada, si se detectó un culpable específico, si están condenando debidamente (...) solamente han hablado en dos ocasiones de personas que están llevando amparo para deslindarse de este suceso”
CARLOS GAMEZ Hijo de Guadalupe Gámez Custodio asesinado en el cereso 3