¡Es un ovni! ¡No!
¡Es un avión! ¡No!
¡Es un diputado trabajando! ¡No!
¡Es Jaime Maussan paseándose por la Cámara de Diputados!
La comparación puede ser extraña, pero de seguro no tanto como ver a este hombre de cabellera blanca y ojillos negros moviéndose por el vestíbulo del Salón de Plenos. Casi sin vida la mayor parte del tiempo, el lugar está repleto de gente que se abre para Maussan, que avanza ahorcado por una corbata ancha y una libreta en la mano izquierda donde de seguro lleva los mensajes de otras galaxias.
No es cierto, dirán los incrédulos y hay que entenderlos, pues hasta el propio Maussan parece sorprendido de que le hayan dejado presentar aquí por primera vez una muestra con una de sus obsesiones: los agroglifos.
¨Pues yo creo de alguna manera estos temas están empezando a permear en los ámbitos oficiales y que muy pronto en las autoridades de México y del mundo tendrán que aceptar la posibilidad de que estemos siendo visitados por seres de otro mundo¨, dice Maussan, emocionado, pero con la mirada ausente de quien está en la luna.
Los agroglifos son esas figuras que suelen aparecer en los campos de trigo: círculos, medallones, figuras geométricas casi de relojería que para los estudios científicos son un fraude, pero que para Maussan resultan ser mensajes de seres súper inteligentes venidos de otra galaxia.
¨A veces son mensajes en código binario, a veces son en clave morse, a veces son fractales, a veces es geometría sagrada a veces son mensajes astronómicos incluso de advertencias de peligros¨, dice.
El investigador de lo paranormal no ha venido solo. A Maussan lo acompaña La Dama del Simbolismo, una mujer llamada Abril de Monserrat, investigadora, escritora y jurista, que ha publicado nada menos que una docena de libros con interpretaciones de los mensajes extraterrestres. Una selección de 50 de ellos componen la muestra ¨Agroglifos y simbolismo universal¨ que se inaugura este día. De hecho, dice orgullosa, en ningún otro Congreso a nivel mundial había organizado una exposición como esta.
Ahora mismo, la Dama del Simbolismo luce un collar de figuras geométricas y un coqueto sombrero negro inclinado hacia el lado derecho, pero es Maussan el que atrae al público: reporteros, empleados de la Cámara, el caricaturista Kemch y hasta diputados que lo miran como si fuera un extraterrestre.
Su presencia causa tanta confusión que la Cámara de Diputados ha colocado una mampara anunciando que quien patrocina la muestra es la Comisión de Cultura, hasta que llega la diputada Sofía del Sagrario de León Maza a decir que en realidad ella pertenece a la Comisión de Comunicaciones y no intergalácticas.
Luego llega otro diputado, Jorge Carvallo Delfín, líder del priismo en la tierra de Javier Duarte, a presumir sus capacidades de vidente. ¨En este concepto no es solamente un tema de creer o no creer?, considera, ?es un tema de una realidad y quienes tenemos la posibilidad o la capacidad para entender más allá de lo vidente o no evidente estamos claros de que existe la posibilidad de que haya vida en otro planeta¨.
Carvallo Delfín pide permiso para difundir mediante su Facebook las interpretaciones de La Dama del Simbolismo, aunque a decir verdad, éstas son tan enigmáticas como discurso de diputado a la hora de explicar la privatización de Pemex.
Después de una hora, Maussan se despide y cruza San Lázaro seguido de un conductor y un camarógrafo de Tercer Milenio. Traje negro, cabello blanco, las puntas de los pies abiertos, las manos colgadas con desgana, habrá quien lo vea salir de la Cámara baja y piense que vino a ver si aquí hay vida inteligente.
