Se sostiene en lo dicho: se cree más listo que los chihuahuenses
Solo para recordarlo, el encargado de la política interna del país, gobernador con licencia de Tabasco, dijo, palabras más, palabras menos, que los tabasqueños son más inteligentes que los chihuahuenses.
Este martes 8 de noviembre, al hablar ante el Congreso del Estado, en una larga réplica que no debió exceder los cinco minutos pero que duró más de 20, el “corcholato” tabasqueño agarró cual pera de boxeador al diputado de Movimiento Ciudadano, Francisco Sánchez.
De ignorante no lo bajó: primero, le corrigió el concepto de “golpe de Estado” que había usado el legislador de Movimiento Ciudadano; luego, se burló del él por usar el término “sadismo” para referirse a una reforma constitucional, le dijo “obtuso” por su corta visión de lo que es la militarización y hasta le sugirió hacerse partidario de Jair Bolsonaro, el ultraderechista presidente de Brasil.
Luego, le apuntó a Mario Vázquez, quien en la víspera le había restregado que en Chihuahua “sí somos francos” y “sí trabajamos”. “No como otros”, le faltó decir.
Al panista le recordó la desastrosa guerra del presidente Felipe Calderón, de la que el panismo se quiere desentender, aunque ya haya “expulsado” al expresidente, dijo.
Total, que ni el secretario vino a dialogar, ni el panismo logró sacar el dictamen en sentido negativo que quería restregarle en la cara a un presidente que ya tiene el voto a favor de 24 legislaturas.
Por lo demás, ahí queda la guerra de porras entre panistas y morenistas, tal vez, en empate técnico.