¡Se dieron hasta con la basura! Regidores van contra PASA, que nomás no pasa
Alfredo Valenzuela actual gerente de “PASA”, invitado especial de los regidores, decidió no asistir, pues seguramente leyó con claridad que en la comparecencia a la que fue citado por las autoridades, sería sacrificado sin compasión en el ruedo .
Pero su inasistencia no lo excusó de la inobjetable realidad de las cientos de quejas acumuladas de los juarenses contra la empresa que presume cotizar en la Bolsa de Valores de México, algo que nadie duda, pues nada más de esta atribulada y “cochina” ciudad obtienen ingresos no menos a los 26 millones de pesos mensuales, por su cuestionado servicio.
La problemática de PASA tiene su origen en que no pasa; por lo menos en el último año se convirtió en un dolor de cabeza para la alcaldía.
En esta ocasión, con motivo de la fallida comparecencia del representante de la empresa, las y los regidores de diversas fracciones tuvieron la oportunidad de consensuar algunas propuestas de solución, pero al mismo tiempo se dieron con todo.
No está usted para saberlo, estimado lector, pero hasta el presidente Cruz Pérez Cuéllar y la gobernadora María Eugenia Campos salieron a relucir. Un asunto de basura se convirtió en reclamos por la inseguridad y supuestos manejos oscuros en la JMAS salieron a flote de la boca del edil Pedro Matus Jr. (PT).
El primer grito de guerra salió de la panista Austria Galindo Rodríguez, quien antes de sentarse a la mesa, llegó pidiendo la destitución de Gibrán Solís, director de Limpia, a quien más tarde le reclamó que no ofreciera soluciones.
El priista Jorge Gutiérrez Casas, que en 2006 fue el artífice de la subrogación de los servicios en la administración de Héctor Murguía, dejó helado al Neto Guevara, director de Servicios Públicos. Le echó en cara que el problema en Limpia es generalizado porque no ejercen la autoridad.
Les reclamó que pierdan el tiempo y recursos limpiando terrenos que son responsabilidad de sus dueños y en la ciudad hay basura porque la empresa no recolecta a tiempo.
Fue más allá. Les advirtió que van a perder la certificación del basurero municipal porque la basura no se entierra a tiempo, porque los que mandan ahí son los “pepenadores”. Hubo un silencio sepulcral.
El panista Joob Quintín se unió al linchamiento y jocoso recordó que el responsable del desmantelamiento de Servicios Públicos, su exdirector Daniel Pando Morales, fue premiado por el gobierno morenista como titular de Comercio.
La también panista Amparo Beltrán Ceballos culpó al alcalde, pues dijo que es la única persona en esta ciudad que defiende a la empresa.
El regidor Matus le respondió duro y arrancó risas en los presentes cuando refirió que los dichos del panista son propios de una cantina y, sin decir nombres, de paso barrió con la gobernadora, que se paseó por la ciudad después de la violenta jornada del jueves 11 de agosto.
Se ofrecieron algunas soluciones que los ediles no explicaron a profundidad. No fueron muy profusos ni finos para discutir argumentos jurídicos y datos duros para sancionar a PASA.
Por lo menos se alcanzó el consenso de que la empresa puede ser multada con 26 millones de pesos, el pago de una sola de las mensualidades cobradas desde hace 16 años.
Mientras la ciudad sufre con el cada vez más pauperizado servicio; en fraccionamientos de vivienda de nueva creación y el suroriente, la frecuencia de la recolección es de una vez cada dos semanas.
Otro planteamiento importante que ojalá y que sea escuchado por las y los regidores grillos, es que claramente el director de Limpia, recordó que la capacidad del Municipio, con sus 14 camiones, y la de PASA, con 80 camiones, no soporta más la presión inmobiliaria generada por la autorización de nuevos fraccionamientos.